Empresas extranjeras se adjudican 15 mil patentes cada año: Ríos Guerrero
Aurora Cordero Pérez
El investigador del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Leonardo Ríos Guerrero, hizo un llamado a los legisladores para mejorar la Ley de Ciencia y Tecnología, ya que empresas nacionales e internacionales lucran con las investigaciones que se hacen en los centros de investigación nacional debido a que no están patentadas.
“En México hay cerca de 16 mil patentes al año que se registran en el Instituto Mexicano de la Protección Intelectual (IMPI), pero más 15 mil son extranjeras, las mexicanas no llegan a 800 y de esas solamente 200 o un poco más son de nuestros científicos mexicanos”, resaltó.
Al participar en el foro informativo “La Protección y Regulación de la Propiedad Intelectual en México”, que se realizó en el Recinto Legislativo, el investigador lamentó que México dependa cada vez más de tecnologías extranjeras debido a que nuestro país no desarrolla esta área tan importante para el desarrollo nacional.
“Los grandes frutos de los investigadores mexicanos que deberían convertirse en patentes se pierden, hay muy buenas propuestas y los mexicanos somos muy buenos publicando a nivel internacional, pero no patentan. Hay 16 mil investigadores acreditados en el sistema nacional de investigadores del Conacyt que publican de uno a dos artículos al año, es una gran cantidad de artículos, pero patentes sólo hay 200 al año”, expuso.
El también ex premio nacional de ciencias y artes en 2003, señaló que se deben hacer cambios en la legislación y normatividad que cambie eso. En ese sentido recordó que en junio de este año se modificó la ley en la materia para abordar la innovación, unidades de vinculación y transferencia de tecnología, que son esenciales, pero aún así indicó que se requiere más apoyo para que eso pueda ser efectivo.
Refirió que México produce 3 mil doctores en ciencias al año, entre nacionales y en el extranjero; 25 mil maestros en ciencia al año, que si están yendo a la industria, en tanto que los 3 mil doctores no encuentran trabajo porque las universidades ya están saturadas. “Se debe hacer algo para que las industrias los contraten y así tengan tecnologías mexicanas”, precisó.
Manifestó que es necesario cambiar la ley de servidores públicos para que los investigadores no se vean como tales y se les permita patentar sus descubrimientos en el campo de la ciencia ya que advirtió que de no realizar tales modificaciones seguirán utilizando otras empresas los conocimientos de esos científicos mexicanos sin pagar algún derecho para utilizar sus investigaciones.
Es necesario buscar las formas para que nuestras universidades públicas del país estén comercializando sus patentes a nivel internacional y con eso tengan más recursos de los que el propio Gobierno les da para investigación. “15 mil millones de pesos tiene el Conacyt para su financiamiento anualmente, de los cuales no se ha destinado presupuesto para comercializar el resultado de sus investigaciones”, refirió.
“Hay que ayudar al IMPI para que las patentes salgan más rápido, aún no es suficiente la ley en ciencia y tecnología y para eso requerimos el apoyo del Congreso”, remató.
En su momento, Gabriel Larrea Richerand, en representación del presidente del Nacional Colegio de Abogados de México, Oscar Cruz Barney enfatizó que la Ley Federal de Derecho de Autor tiene un error de fondo al no otorgar facultades de sanciones al Instituto de Derecho de Autor y tenerlas que remitir al Instituto Mexicano de Propiedad Industrial.
“Además de que esas infracciones no le benefician para nada a los autores. Lo que se debe de hacer es darle preferencia a la protección de los actores y en su caso a los inventores para efecto de que ellos si se han violado sus derechos puedan resarcir sus daños, en primer lugar y después que venga la cuestión de infracciones”, concluyó.
El investigador del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Leonardo Ríos Guerrero, hizo un llamado a los legisladores para mejorar la Ley de Ciencia y Tecnología, ya que empresas nacionales e internacionales lucran con las investigaciones que se hacen en los centros de investigación nacional debido a que no están patentadas.
“En México hay cerca de 16 mil patentes al año que se registran en el Instituto Mexicano de la Protección Intelectual (IMPI), pero más 15 mil son extranjeras, las mexicanas no llegan a 800 y de esas solamente 200 o un poco más son de nuestros científicos mexicanos”, resaltó.
Al participar en el foro informativo “La Protección y Regulación de la Propiedad Intelectual en México”, que se realizó en el Recinto Legislativo, el investigador lamentó que México dependa cada vez más de tecnologías extranjeras debido a que nuestro país no desarrolla esta área tan importante para el desarrollo nacional.
“Los grandes frutos de los investigadores mexicanos que deberían convertirse en patentes se pierden, hay muy buenas propuestas y los mexicanos somos muy buenos publicando a nivel internacional, pero no patentan. Hay 16 mil investigadores acreditados en el sistema nacional de investigadores del Conacyt que publican de uno a dos artículos al año, es una gran cantidad de artículos, pero patentes sólo hay 200 al año”, expuso.
El también ex premio nacional de ciencias y artes en 2003, señaló que se deben hacer cambios en la legislación y normatividad que cambie eso. En ese sentido recordó que en junio de este año se modificó la ley en la materia para abordar la innovación, unidades de vinculación y transferencia de tecnología, que son esenciales, pero aún así indicó que se requiere más apoyo para que eso pueda ser efectivo.
Refirió que México produce 3 mil doctores en ciencias al año, entre nacionales y en el extranjero; 25 mil maestros en ciencia al año, que si están yendo a la industria, en tanto que los 3 mil doctores no encuentran trabajo porque las universidades ya están saturadas. “Se debe hacer algo para que las industrias los contraten y así tengan tecnologías mexicanas”, precisó.
Manifestó que es necesario cambiar la ley de servidores públicos para que los investigadores no se vean como tales y se les permita patentar sus descubrimientos en el campo de la ciencia ya que advirtió que de no realizar tales modificaciones seguirán utilizando otras empresas los conocimientos de esos científicos mexicanos sin pagar algún derecho para utilizar sus investigaciones.
Es necesario buscar las formas para que nuestras universidades públicas del país estén comercializando sus patentes a nivel internacional y con eso tengan más recursos de los que el propio Gobierno les da para investigación. “15 mil millones de pesos tiene el Conacyt para su financiamiento anualmente, de los cuales no se ha destinado presupuesto para comercializar el resultado de sus investigaciones”, refirió.
“Hay que ayudar al IMPI para que las patentes salgan más rápido, aún no es suficiente la ley en ciencia y tecnología y para eso requerimos el apoyo del Congreso”, remató.
En su momento, Gabriel Larrea Richerand, en representación del presidente del Nacional Colegio de Abogados de México, Oscar Cruz Barney enfatizó que la Ley Federal de Derecho de Autor tiene un error de fondo al no otorgar facultades de sanciones al Instituto de Derecho de Autor y tenerlas que remitir al Instituto Mexicano de Propiedad Industrial.
“Además de que esas infracciones no le benefician para nada a los autores. Lo que se debe de hacer es darle preferencia a la protección de los actores y en su caso a los inventores para efecto de que ellos si se han violado sus derechos puedan resarcir sus daños, en primer lugar y después que venga la cuestión de infracciones”, concluyó.
0 Comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]
<< Página Principal